martes, 29 de noviembre de 2016

2010

Hace mucho tiempo atrás
me intenté mentir
fríamente
intenté escribir
algo feliz
vómito de colores
hablar sobre árboles y sonrisas
es fácil
desentrañar los oscuros misterios que el alma sufre
raspar el sarro del corazón
no lo es
no es sencillo
mirar el contorno de las lágrimas
observar mi ego
como gotea putrefacción
transformar aquello en palabras
y que luego otras almas inquietas lo lean.

Escribir no es precioso
leer gritos imperiosos
en viejos escritos
escritos llenos de amargura y barbas blancas
no es placentero
menos placentero es
tener títulos
de poemas malditos
o malditos poemas
inconclusos desde el útero
guardan polvo ahí en mi cuaderno
me quitan espacio para crear
me hacen olvidar.

No escribo para complacerte
mucho menos para complacerme
escribo
porque es la única forma aparente
de abastecer la conciencia de falsos motivos para seguir adelante
¿seguir adelante?
seguir para atrás
dejar en coma al futuro un día a medio día
tirar de la manecilla del reloj
y flotar junto al tiempo.

Miss ya (o "la sucia sensación de extrañarte así")

Te extraño
estoy alejado
extraño estar juntos
abrazados
o desparramados
no sé
solo sé
que esta noche te extraño-

jueves, 24 de noviembre de 2016

Viejas costumbres

A veces al pasar por una iglesia seguía haciendo -involuntariamente- aquel gesto que hace tiempo le hacía tanto sentido.

domingo, 20 de noviembre de 2016

No vuelva (solo si quiere)

Te pediré que te vayas
lenta y dolorosamente
y que camino a la salida
dejes la puerta bien abierta
así
de par en par.

martes, 15 de noviembre de 2016

Por el borde del Mapocho corre un viento de playa

Estoy que salto
a poto pelao
a las aguas cagás del Mapocho.

Casa sola (o "Metáfora de cómo me siento ahora")

Los pasos aún resuenan en aquella casa sola
la desolación se hace persona y se apoya en los derruidos muros
esperando que estos se vengan abajo
solo por diversión.

Corre un extraño viento
que entra por las ventanas rotas
susurra al pasar por los dinteles de las puertas
y de noche grita
llora
reclama
hace miles de cosas
pero la casa está abandonada
así que nadie lo escucha.

A veces los candados se desprenden de las puertas
y salen a tomar aire
toda la casa queda desprotegida
lista para ser asaltada por cualquier alma maleante
pero aquello no ocurre
para mi tristeza
nunca pasa.

La casa suspira y se remueve el polvo de sus muebles
se mueve y remece sus cimientos sin quererlo
desea bien adentro derrumbarse
para así emitir uno que otro ruido
quizás renacer
no
ser reconstruida
volver a estar llena de vida
volver a estar llena de felicidad.

Aquello no sucede y la casa se queda sola
se siente acompañada por las ratas que circulan por ahí
pero sabe que no puede contar con ellas para casi nada.

Me gustaría decirles que aquella triste casa es otra persona
pero no es así
la casa sola soy yo.

¿Mi vida?

Ahora mismo ni yo sé que estoy haciendo con mi vida
a ratos siento que la disfruto de una manera plena y segura
vivo sin frenos
pero a otros ratos me doy cuenta que la estoy destruyendo
y que me alejo del camino que mis ancestros han dibujado para mí.
La verdad
es que ahora siento que todo está perdido
de esta no hay escapatoria.
¿Mi vida?
Se me sale por las costillas
se derrite entre mis dedos
es arena en una chala que recorre el desierto
es también el llanto que la lluvia camufla
mi vida ahora mismo es una bolsa en la carretera
que sigue el conducto del viento
cierra los ojos y espera a que algún automóvil la golpee
no muy fuerte
pero que la ponga de vuelta en su camino.

Bailo desde una cornisa colorida y creo que todos me miran
hago como que me lanzo y nadie me toma atención
ahí llega la depresión.

Yo no sé que estoy haciendo con mi vida
de momento la deposito en mis bolsillos sin fondos y llenos de pelusas
la dejo ahí
perdida
y vivo los sentimientos que no son productivos
pero me hacen feliz
¿qué hacer
cómo arrancar de esta súper-presión social-familiar?

Ya no quiero una palabra más
quiero dormir y despertar
cuando mi vida ya esté definida
por ahora definirla es mucha responsabilidad.